Opinión

La revolución llega al Palau

El Barça quiere que Jasikevicius continue como entrenador del Barça / EFE

Un cambio radical. La revolución en el basket del Barça se ha consumado con la marcha de Jazikevicius y Mirotic del club. Entrenador y estrella ponen fin a su etapa azulgrana con un balance triste teniendo en cuenta el motivo de sus fichajes y el coste de sus salarios. Mirotic, que cobraba 11 millones, ha estado cuatro años en el club y Jasikevicius, que cobrabra siete, tres temporadas.

En estas campañas, el Barça ha ganado dos ligas y dos Copas del Rey, sin poder levantar la Euroliga, motivo real de sus fichajes. Jasikevicius era el entrenador que el Palau pedía desde hacía temporadas y Bartomeu accedió a su contratación como solución a su reto de conquistar la EuroLiga, título que tradicionalmente le ha sido complicado de ganar al Barça pues lleva solo dos trofeos y seis subcampeonatos.

Con Jazikevicius se va un entrenador que generó mucho ruido, pero su trabajo aportó escasos resultados. Mirotic llegaba tras su etapa en la NBA y dejando escapar una oferta para irse a Utah. Sin embargo, no encontraba sentido a toda la locura de la NBA ni a su rol que tenía y rompió con todo para regresar a Europa. Tras jugar en el Madrid, fichó por el Barça y la huella que deja es la de una persona especial que no supo llevar al equipo hasta el título deseado. Un enorme jugador que no es un ganador.

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Así es el deporte. Cuando logras los objetivos, tienes continuidad u ofertas para renovar; cuando no los alcanzas, las puertas se cierran. Como ha hecho en las últimas horas el FC Barcelona. De un plumazo, se ha cargado a los dos referentes del equipo para empezar una nueva etapa con otros jugadores y un entrenador con relativa experiencia pues Roger Grimau conoce la casa como nadie, pero como entrenador solo ha dirigido al Barça Atlètic y del Júnior en los dos últimos cursos, además de asistente en el filial en LEB Oro y LEB Plata anteriormente. Las expectativas serán otras, pero con el cambio se rebaja la masa salarial y llega el que fue el capitán que levantó la última Euroliga, la de 2010.