Esta es la lesión más frecuente entre los "corredores de montaña", y no son las rodillas

La primavera está en su pleno apogeo, suben las temperaturas y los amantes del running y el aire libre se lanzan disfrutar del buen clima y el aumento de las horas de luz solar. Y lo hacen con carreras por la montaña y excusrsiones. Actividades deportivas cuyas ventajas son innumerables, pero que también requiere tomar algunas precauciones, como:

• Un buen entrenamiento
• Revisiones cardiovasculares
• Comprobar el estado de músculos y articulaciones. 

Porque como advierte el doctor Fernando Corbí, traumatólogo especialista en cadera del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, son muchas las lesiones que se pueden producir durante las carreras de montaña, entre ellas, una de las más habituales son las lesiones en la cadera. 

Lesiones de cadera habituales en los corredores de montaña

Como explica el especialista en traumatología:

• "La cadera es una articulación diseñada para correr porque tiene superficies articulares amplias y está bien reforzada muscularmente, pero el corredor debe tener en cuenta que al correr la cadera tiene que soportar por impacto la carga del peso del cuerpo y puede tender a sobrecargarse”.
• Esta sobrecarga provoca dolor, bien en la parte frontal de la cadera, en la trasera o exterior, en la ingle o en la nalga. 

Y aunque normalmente, cuando de practicar running se trata, pensamos más en el daño que se podría producir en las rodillas, lo cierto es que este tipo de lesión es muy habitual en corredores de montaña. 

“La patología se produce por una doble causa, tal y como subraya el traumatólogo:

• Primero porque es un deporte de alto impacto
• Y segundo al realizar las subidas, porque aumenta el ángulo de flexión de la cadera del corredor y, en consecuencia, aumenta el pinzamiento en la parte anterior de la articulación.

De hecho, alrededor de un 70% de los runners de montaña sufren algún tipo de lesión musculoesquelética”.

Este tipo de problemas en la articulación de la cadera se da sobre todo en aquellos corredores que ya sufren algún problema en esa zona_

• Aquellos que son de mayor talla o peso
• Los que carecen de elasticidad
• Los que entrenan en superficies muy duras y sin la suficiente amortiguación. 

Dentro de este tipo de lesiones, las músculo-tendinosas son las patologías más frecuentes. Y, tal y como explica el doctor Corbí, las más comunes son:

• “La bursitis trocantérea
• La sobrecarga de posas
• El dolor en la espina iliaca anterosuperior
• La osteopatía de pubis
• El síndrome del piramidal”,

Cómo prevenir lesiones durante las carreras en montaña

La mejor forma de no sufrir ninguna de estas lesiones en la articulación de la cadera es preparar correctamente el cuerpo, explica el especialista.

• “Hay que fortalecer la musculatura no solo corriendo sino también con ejercicios realizados en gimnasio o con deportes sin impacto
• Estirar de forma adecuada.
• También es clave trabajar una buena estabilidad lumbo-pélvica
• Tonificar los músculos implicados en la carrera”, . 

Además, subraya que “los mayores riesgos vienen de las sobrecargas por impacto repetitivo, sobre todo si existen problemas previos en las superficies articulares”.

Por tanto, “es muy importante tanto para hombres como mujeres, trabajar a nivel muscular, -afirma el doctor Corbí-, ya que una falta de movilidad en la cadera, de estabilidad en la rodilla o en la parte lumbar pueden llevar al desarrollo de lesiones.”

Si a pesar de seguir todas las recomendaciones de prevención se sintiera cualquier dolor en la cadera que no mejore con reposo, hay que acudir a un especialista para determinar si hay alguna lesión y de cual se trata. 

Tras tratar el problema, el corredor de montaña puede volver a practicar esta disciplina, pero tomando algunas precauciones.

“En ocasiones, con reeducar la forma del entrenamiento y fortalecer el tono muscular de las zonas afectadas es suficiente.

Muchas veces el problema es muscular o tendinoso y está más asociado a la intensidad y/o al volumen del entrenamiento o defectos en la técnica de carrera”. Por ello, con realizar series más cortas al correr y asesorarse por un especialista en medicina deportiva es suficiente. 

• Si persisten las molestias, el especialista puede recomendar la toma de analgésico o antiinflamatorios, y acudir a un fisioterapeuta.
• Si el dolor es muy fuerte el especialista puede valorar las infiltraciones bien con corticoides o con plasma rico en plaquetas.
• Incluso en algunos casos puede ser necesario realizar una operación quirúrgica, bien una cirugía abierta, bien artroscópica.

“El tratamiento con artroscopia de la cadera del corredor, nos permite una reincorporación al running de manera efectiva y precoz”, concluye el doctor Corbí.