Marcelo, señalado

El Madrid salió vivo de Valdebebas ante un Chelsea superior, pero hubo quien salió más bien malparado. Es el caso de Marcelo. El brasileño ya no es el torrente ofensivo que era en sus mejores épocas y en defensa aún se le están viendo más las costuras. El hecho de que Mendy le haya pasado por encima en la titularidad y la falta, por lo tanto, de minutos, tampoco ha ayudado.

Lo cierto es que ante el Chelsea vimos a un Marcelo perdido por el campo, concediendo demasiadas ventajas a una línea atacante tan peligrosa al espacio como la que formaban Mount, Werner y Pulisic. El brasileño en ningún momento se encargó de tapar su banda y por ahí encontró el conjunto 'blue' un filón para atacar.

Tampoco se vio a Marcelo recuperar posición una vez el equipo perdía el balón. Muy lento en las transiciones, como el resto del equipo. Por esa zona, entre Kroos y Marcelo, Pulisic vivió como pez en el agua en el primer tiempo.

Luego, con un Madrid más dominador, las contras del Chelsea remitieron y Marcelo tuvo algo más de protagonismo con el balón. Suyo es el centro que termina en el tanto de Benzema.

Movió el esquema Zidane en la segunda mitad e incrustó a Nacho en el carril zurdo para tapar los espacios. Ese movimiento le dio fortaleza al equipo y permitió a Marcelo mirar algo más para arriba. Aun así, otro partido pobre de un lateral brasileño que le ha dado tantísimo al Madrid que ahora se está quedando en muy poco.