Dicho por él, La Vuelta siempre ha sido su carrera favorita. Por eso Nikias Arndt buscó el triunfo desde el primer día y lo tuvo cerca en la cuarta etapa, pero Jakobsen le 'usó' para lanzarse en el sprint final y no lo consiguió. En Igualada, contra viento y marea -literalmente-, el corredor del Sunweb olvidó sus días como gregario de Dumoulin y tomó el protagonismo para embalarse sentado en su bicicleta y vencer sin mayores preocupaciones en la octava etapa de la Vuelta a España 2019.
Su potencia dejó sin opciones a Álex Aranburu (Caja Rural), de excelsa carrera pero sin premio... una vez más. Ya le había pasado en la Vuelta a Burgos, donde pudo vestir el primer maillot de líder pero apenas centímetros le privaron de hacerlo.
Hoy en el arribo a Igualada el guipuzcoano aguantó la lluvia y el viento como un campeón, pero no pudo aguantar igual a Arndt y entró un par de rodadas después. ¿Su consuelo? En Burgos terminó conquistando una etapa, y aspira a lo mismo en la ronda grande ibérica.
El accidentado descenso de Monserrat provocó un final tan apasionante como peligroso. O que le pregunten a Tusveld, el neerlandés que quiso apretar para alcanzar a los de arriba y terminó yéndose al suelo en una de las últimas rotondas.
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Quizá por eso el Astana decidió volver a dejar ir el maillot rojo de Superman López, quedando en manos de Nicolas Edet (Cofidis): el ciclista galo es el nuevo líder de La Vuelta. El podio momentáneo lo completan Teuns como segundo y el propio 'Superman' en tercer lugar. Valverde se mantiene en el 'top 5' a 3'17'' de Edet.