El Villarreal sigue con su paso firme y se impuso a un flojo Valladolid para no descolgarse de la 'zona Champions'. Los goles de Chukwueze y Pau Torres fueron suficientes para tumbar a los pucelanos, inoperantes hasta el tramo final y que no salen de la última posición
Como era de esperar, el 'submarino amarillo' salió a por el gol desde el pitido inicial. Tomaron las riendas del partido y sometieron a un Valladolid que se dedicaba a defender y a esperar la suya a la contra. Misión imposible. Y menos cuando hay Chukwueze en el otro equipo. Internada de Pedraza por banda izquierda y el nigeriano, que llegó como un tiro desde segunda línea para batir a Masip, que volvía a la titularidad.
La historia no cambió. El Villarreal continuaba asediando y buscando finiquitar el encuentro, en vistas de la cita europea que tiene el próximo jueves. Ahí emergió la pizarra de Emery. En la salida de un córner, Alcácer peinó y Pau Torres anotó a placer. El segundo. Incluso Gerard Moreno, con una volea que repelió la madera, pudo echar el lazo antes del receso.
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Una sentencia que nunca llegó. El VAR anuló un tanto del de Santa Perpètua por fuera de juego. Y el Valladolid, que creció en la segunda mitad, se encontró con dos balones al poste que le privaron de rescatar un empate en La Cerámica. La primera parte fue una losa demasiado grande para los pucelanos.