Serena Williams salió al paso de algunas voces críticas que la señalaban por querer marcar las diferencias entre el resto de jugadores, respecto a las medidas de protección y control del coronavirus, y que les llevará a estar aislados en una 'burbuja' en Nueva York, en un hotel de la ciudad, sin poder hacer nada más que ir a competir y regresar al hotel.
Algo que no hará la gran campeona Serena Williams, que explicó los motivos que le han llevado a estar en una casa en lugar del hotel, como el resto de competidores. "Tengo problemas pulmonares y estar en el hotel es un riesgo", dijo en la previa del torneo de Cincinnati, última competición antes del Us Open.
"En mi casa, puedo controlar más. No hay personal de mantenimiento, nadie. Tengo problemas de salud reales y solo necesito descansar para ser competitiva", argumentó Serena, que ve con buenos ojos el trabajo que está realizando el US Open para proteger la salud de todo el mundo.
Buen trabajo del US Open
"Creo que está siendo algo bueno, nos protegemos en la burbuja. Somos muchos, 128 jugadores y 128 jugadoras. Los organizadores están haciendo un buen trabajo", comentó, a la espera de rival.
"Personalmente, aplico todo incluso con protocolos extra por mi salud. Tomo muchas precauciones, probablemente más que la mayoría de la gente", comentó en la rueda de prensa previa al Masters 1.000 de Cincinnati
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Respecto a si las ausencias de este año en el US Open lo convierten en un torneo diferente al habitual, dijo que "estamos viviendo un capítulo importante de la historia. Siempre habrá un asterisco porque nunca se ha hecho antes. Si ganas, dirás que pude ganar en estas locas circunstancias en las que no había fans. Quizás sea una prueba más mental que cualquier otra", sentenció la leyenda del tenis