Dos puertos fuera de categoría que han creado la leyenda del Tour y que dejarán este jueves la clasificación general lista para que quede definitiva en la contrarreloj del próximo sábado.
Los escaladores tienen su última oportunidad, una durísima etapa que llega, además, tras dos jornadas pirenaicas con siete cotas de primera o especiales al final de la carrera, con las piernas ya muy cansadas tras más de dos semanas de competición.
En la última etapa de montaña, no muy larga, de 145,5 kilómetros entre Pau y Hautacam, la jornada comenzará suave, con dos cotas de tercera categoría. A partir del kilómetro 78, empezará la ascensión al Tourmalet, con 17,1 kilómetros al 7,3 % de pendiente media. Su cima está situada a 50 kilómetros de la meta.
El descenso es largo y tras una zona de transición desemboca en la subida al Hautacam, 13,6 kilómetros al 7,8 % y con rampas por encima del 12 %. El Tourmalet puede servir de trampolín para una larga escapada que deberá rematarse en el Hautacam.
Etapa 18:
Pau - Hautacam, 145,5 kilómetros
Salida: 13.15 horas
Llegada prevista: 17.31 horas.
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Montaña: Cota de Bénéjacq (3a), a 28 Cota de Loucrup (3a), a 56 Tourmalet (E), 17,1 al 7,3 %, a 95,5 Hautacam (E), 13,6, al 7,8 %, en meta.