Rafa y Susi ha sido una de las tantas citas que se organizaron ayer en el restaurante de First Dates. Aquí Carlos Sobera recibió con simpatía y amabilidad a Rafa y Susi. Dos solteros que venían a encontrar algo especial. Rafa comentó el cambio radical que había tenido su vida. De tener un imperio empresarial y un físico de 130 kilos ha pasado a ser monitor de ciclo indoor y trabajar como entrenador personal y coach nutricional.
Susi, su cita, era una apasionada de la moda y de todos los complementos que ello conlleva. “A mi casa no puede venir nadie porque la única habitación que quedaba la ha hecho vestidor” afirmaba. Susi al ver a rafa ha sentido que sí, que era atractivo, pero que no era el tipo de hombre que esperaba encontrar. “Me han faltado unos tatoos” ha declarado ella sin cortarse a la cámara.
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Finalmente, después de tanta cordialidad y no encajar demasiado bien, ambos han decidido no tener una segunda cita. Ella por lo que había comentado, él porque no sabía que ella vivía con su ex en la misma casa y con su hijo. Rafa no podría vivir bajo el mismo techo.