Microsoft ha optado finalmente por enterrar un proyecto que a todas luces no sonaba muy bien: hablar con los muertos. Concretamente se trataba de un chatbot que simulaba conversaciones con familiares o cualquier persona que quisiera el usuario. Evidentemente, el mood de la gente al enterarse de que este proyecto estaba en marcha no fue el más propicio, así que la compañía ha dado marcha atrás al considerar que era demasiado "perturbadora".
La idea era que se pudiera hablar con entidades vivas o del pasado, desde amigos a familiares hasta personajes famosos de la historia o de la ficción. Esta idea llegó incluso a patentarse en los Estados Unidos, pero finalmente el gerente general para la Inteligencia Artificial de Microsoft ha dicho en Twitter que no quieren seguir desarrollando la idea ya que es muy perturbadora.
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¿Cómo pensaban hacerlo? Recopilando datos compartidos en internet y en las redes sociales, entrenando así mediante machine-learning a una inteligencia artificial que fingiría ser nuestro familiar fallecido. Incluyendo por supuesto muestras de su personalidad. El nivel era tan elevado que se esperaba que incluso imitara la voz de la persona fallecida.