Las portadas se las llevó Taty Castellanos, autor de cuatro goles. Los focos se los llevó Vinicius, autor de las mejores jugadas y los peores impulsos. Los elogios se los llevó Míchel, autor de un equipo desacomplejado. Y el protagonismo de esta sección se lo lleva Oriol Romeu, un jugador que, sin levantar la voz, se ha erigido en una figura capital para la gran temporada del Girona.
Club de lectura
Se nota en cada acción, en cada carrera, en cada choque, en cada salto y en cada pase. Ha jugado en la Premier. Y no pocos años. Eso marca. Y otorga un pedigrí: el de dejarlo todo en el campo, el de respetar el oficio, el de saber sufrir y disfrutar sufriendo. Oriol Romeu quizá no tenga las portadas, los focos ni los elogios. Pero además de su gran gusto por la lectura, lee los partidos como nadie.