España sub-21 hizo aguas en su primer partido de 2024, un amistoso que debía servir de preparación para el del próximo martes (19.00 horas contra Bélgica. Seguro que la derrota contra Eslovaquia, del todo inesperada, significará un serio toque de atención.
El carácter amistoso del encuentro se percibió en el ritmo lento y pausado del primer tramo del partido. A los de Santi Denia se les atragantó el 4-5-1 planteado por Eslovaquia, pero aun así, Samu Omorodion pudo abrir el marcador a los diez minutos en un cabezazo alto a centro de Hugo Novoa.
Fallo defensivo que se pagó caro
Fue la única aproximación peligrosa de toda la primera mitad. Fermín trató de jugar entre líneas, pero sin encontrar espacios, y los eslovacos se lo fueron creyendo.
La escasa concentración de la Rojita dio paso al gol visitante. Hugo Novoa cedió hacia atrás con demasiada fuerza a Francés y el balón llegó directo a Jambor, que resolvió muy bien ante Iturbe.
Trató de reaccionar España con un chut mordido de Fermín, que le puso ganas como siempre, pero quien estuvo más cerca de otro gol fue la selección centroeuropea. Iturbe evitó el segundo a bocajarro de Marcelli.
La puntilla de los eslovacos
Denia, en su partido 200 con las inferiores de España, cambió el once al completo para la segunda mitad. Pablo Torre tomó el relevo blaugrana de Fermín y una semichilena suya fue de lo más peligroso. La Rojita salió con otro ritmo que se traslució en ocasiones de gol. Moleiro también lo intentó hasta por tres veces. Las dos primeras se fueron por alto y en la tercera, gran estirada de Belko a cabezazo del tinerfeño.
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Pero España se llevó otro duro golpe del que ya no volvería a reaccionar. En el minuto 73, sentenciaron los eslovacos en una gran acción de Kapralik ante Javi López, se cambió el pie en el movimiento y la cruzó con precisión. Derrota merecida.