La selección española ha dado un vuelco en un año. En marzo del año pasado, la Roja arrancaba la fase de clasificación para el Mundial del 2022 y fue un momento clave para acelerar una transición que está resultando exitosa. La era de Sergio Ramos como líder absoluto llegaba a su fin y se abría otra con jóvenes talentos pisando fuerte, con Pedri como cara más visible.
El tinerfeño debutó ante Grecia en Granada y ya en el siguiente partido, contra Georgia, fue decisivo para la victoria y enderezar el rumbo camino de la Copa del Mundo de Catar. En el siguiente duelo, frente a Kosovo, Ramos disputaría sus últimos minutos con la Roja. Entró en la recta final de un 31 de marzo para llegar a los 180 encuentros como internacional.
A partir de entonces llegó el rosario de lesiones del que fuera capitán de la Roja y Sergio Busquets lo relevó. El nuevo capitán se volcó desde el primer día con los jóvenes, entre los que Pedri llamó de inmediato la atención. Busquets contó con la ayuda de Jordi Alba, quien volvió a esta convocatoria de marzo del 2020 después de un año y medio de ausencia.
Pedri lidera a la selección española
| EFELucho fue activando sus cambios, como la incorporación de Robert Sánchez como tercer portero con Kepa, y siguió potenciando a futbolistas de talento jóvenes como Ferran Torres, Dani Olmo o Eric Garcia. A este grupo añadió Gavi en la UEFA Nations League de octubre, así como a Yéremi Pino, del Villarreal.
El mejor de la Eurocopa
En el caso de Pedri, Luis Enrique no tuvo dudas para llamarle de cara a la Eurocopa del 2021 convirtiéndose en el principal referente del equipo y entró en el once ideal del torneo. Fue su manera de ya adquirir el rol de estrella del fútbol en el gran escaparate de la Eurocopa.
El descanso tras ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos y las lesiones posteriores impidieron su regreso.
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Ahora, ocho meses después, volverá a jugar con la Roja en Cornellà y lo hará con el '10' a la espalda. Un número simbólico y reservado para los privilegiados.