No pudo ser. Francia fue muy superior a España y le apea del sueño de coronarse como campeones del Mundial sub-17 con una dura goleada (1-6). Los de David Gordo empezaron ganando pero con el paso de los minutos se empequeñecieron en el césped y fueron apabullados con facilidad por una Francia que huele a título mundial.
Repetía el once habitual David Gordo para lograr el pase a las semifinales. El inicio no podía ser mejor para el combinado español ya que Germán Valera marcaba antes de los diez minutos. El centrocampista del Atlético de Madrid aprovechaba un buen toque de balón de Ilaix Moriba para perforar la red francesa. Parecía que el partido ya estaba en la buena línea pero Francia es mucha Francia y aún no habían dicho la última palabra. A los pocos minutos, Kouassi empataba en un saque de esquina imponiendo su físico por encima de la defensa española. Los de David Gordo trataban de reponerse pero no encontraban la circulación de balón. Ni Pedri ni Robert Navarro podían recibir con comodidad y el ataque pasaba por pases al espacio para que corriera Pablo Moreno, que se peleaba con el muro francés. Solo los disparos de Ilaix Moriba incomodaban al guardameta francés. En el otro lado del campo, Mbuku, tras una gran jugada de Lihadji por banda, completaba la remontada tras un semifallo de Ivan Martínez. El propio guardameta español se rehacía minutos después con una gran intervención.
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En el descanso, los de David Gordo trataron de buscar soluciones ante el vendaval francés pero no las encontraron ya que solo iniciar vieron como Lihadji ampliaba el marcador. El resultado ya era muy complicado de remontar para un combinado español que se veía incapaz de plantar cara a un rival físicamente muy superior a ellos y con unos extremos que rompían a la espalda en cada ocasión que podían. Pero lo peor aún estaba por llegar. Pembélé aprovechaba una mala salida del portero español para marcar el cuarto. No fue el último ya que Rutter, el delantero centro, no se quería perder la fiesta de sus compañeros y ponía la manita en el marcador. Los franceses lo tenían claro. Pase al extremo, encarar y buscar el centro para los jugadores que llegan. Así llegó el sexto gol, obra de Aouchiche, que la mandaba a la escuadra. Por suerte, no hubo tiempo para más. España se vuelve de Brasil tras caer eliminada en los cuartos de final. Francia fue infinitamente mejor. Toca levantar la cabeza.