El Granada era un rival de exigencias mayores y el Nàstic sabía de su complejidad. Uche, con una actuación sublime, sentenció en media hora el partido con dos goles que pusieron su nombre de nuevo en la palestra.
La primera parte fue de lo mejor que se ha visto en el Nou Estadi esta temporada. Tras la derrota en Tenerife y las dudas ocasionadas, el conjunto de Rodri las dejó rápidamente atrás y convenció con control y con un Uche que resurgió.
En dos acciones, el nigeriano sentenció y se ganó de nuevo a Tarragona. En la primera se inventó un control de superclase y definió perfecto por debajo las piernas de Javi Varas. Tres minutos más tarde, pérdida defensiva de los andaluces y Uche de nuevo, superó a Varas para poner el 2-0 en el marcador.
El delantero nigeriano pudo sentenciar en una jugada mágica y hacer realidad el hattrick que buscaba, pero tras un buen control se le fue alta la pelota.
El bagaje ofensivo del Granada fue pobre, pero la superioridad defensiva de los tarraconenses secó a los nazaríes, que ni con Joselu, ni Machís ni Rey Manaj ni Puertas, supieron cómo desbloquear al Nàstic.
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