El Granada alcanza las diez jornadas sin perder y se mantiene en puestos de ascenso directo al vencer este domingo en el Nuevo Los Cármenes por 1-0 al Oviedo, que mereció más, con un postrero tanto de Ricard Sánchez.
El primer tiempo se jugó con el lento ritmo que le puso al partido el Oviedo, que gozó de la mejor ocasión antes del descanso en las botas de un Viti Rozada que mandó su remate fuera por poco.
El Granada, condicionado por las ausencias del albanés Myrto Uzuni y del israelí Shon Weissman, ambos con sus selecciones, no se encontró cómodo en ningún momento y sólo inquietó en el primer tiempo al meta francés Quentin Braat con un chut lejano de Bryan Zaragoza.
La segunda parte comenzó con una clara doble ocasión visitante en la cabeza de Borja Bastón, que primero se topó con una sensacional Raúl Fernández y después remató fuera.
Los locales siguieron igual de asfixiados por el buen planteamiento táctico del Oviedo y sin crear ocasiones claras, mientras que los locales volvieron a rozar el gol con un chut de Manu Vallejo al palo.
Se volcó el Granada en los minutos finales, con Antonio Puertas y Alberto Soro probando a Braat, y encontró su premio en el minuto 89 con el tanto de Ricard al rematar desde fuera del área, tras un córner, un balón que se envenenó al tocar en Sergi Enrich y despistar al meta visitante.
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Después del partido, la afición rojiblanca despidió en pie al jugador visitante Ángel Montoro en su regreso al Nuevo Los Cármenes tras ser uno de los mejores futbolistas que ha tenido el Granada en la última década.