Nutrición médica: qué es y cómo puede ayudar a los pacientes con cáncer o alzhéimer

Es de sobra conocido que la nutrición es uno de los pilares fundamentales de la salud. 

De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) resalta que una dieta saludable y variada ayuda a protegernos de la malnutrición en todas sus formas, y de enfermedades no transmisibles como la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares como el ictus, y el cáncer.

En los dos primeros años de la vida de un niño, una nutrición óptima impulsa un crecimiento sano y mejora el desarrollo cognitivo. Y es que, todo lo que comemos afecta a nuestra salud... Y nuestra propia salud (cuando estamos enfermos) también influye en nuestras necesidades nutricionales.

Es lo que se conoce como nutrición médica.

• Ayuda a tratar las enfermedades y solo debe ser utilizada bajo la supervisión de un profesional médico. La nutrición médica contribuye a tratar aquellas carencias nutricionales que, de lo contrario, no podrían resolverse con una alimentación normal.

Desnutrición relacionada con la enfermedad: ¿qué es?

Es habitual que cuando enfermamos, aunque sea de forma leve, perdamos el apetito en mayor o menor medida, sin que ello tenga excesiva importancia.

• Pero esta falta de ganas de comer se convierte en un auténtico problema cuando hablamos de pacientes con patologías agudas o crónicas, ya que pueden generar una alteración denominada "desnutrición relacionada con la enfermedad" (DRE).

Este tipo de desnutrición puede deberse a un déficit de la ingesta por parte del paciente o bien a que, a causa de la patología que sufre o del tratamiento, su organismo no asimila correctamente los nutrientes.

 El doctor Ir Ardy van Herlvoort puntualiza que el uso de productos de nutrición médica se traduce en mejores resultados en pacientes con desnutrición relacionada con la enfermedad (DRE) o presentan necesidades específicas en situaciones de fragilidad, alzhéimer u oncología.

• “Favorece el estado nutricional de pacientes que no pueden comer o tragar con normalidad en casos de ictus, disfagia o cuidados intensivos”.

Los beneficios de una nutrición médica en este tipo de pacientes son los siguientes:

• Ganan fuerza y energía.
• Las personas mayores son independientes durante más tiempo y se alivian los síntomas de la enfermedad.
• Los pacientes se recuperan más rápido.
• Se retrasa la progresión de la enfermedad.
• Mejoran su calidad de vida.
• Reducen los costes sanitarios (12% de ahorro promedio en comparación con los grupos de pacientes que no reciben nutrición médica especializada).
• Disminuye el número de hospitalizaciones y la duración del ingreso (los fallecimientos y complicaciones se reducen en un 35%, y los pacientes que reciben nutrición médica pueden pasar hasta dos días menos en el hospital respecto a los que no la reciben durante su ingreso hospitalario).

¿Para quién está indicada la nutrición médica?

En los últimos años, la nutrición médica se ha reafirmado como uno de los pilares fundamentales del tratamiento integral del paciente.

Se trata de un complemento que se ha convertido en esencial al tratamiento farmacológico y que es un medio que ayuda a los enfermos a combatir su patología y mantener su vitalidad. Hablamos de:

• Pacientes con alzhéimer, diabetes o úlceras por presión.
• Sarcopenia. Un trastorno musculoesquelético generalizado y progresivo que se caracteriza por la pérdida de masa y función muscular, junto con una disminución del desempeño físico. Los signos y síntomas incluyen debilidad, cansancio, falta de energía, problemas de equilibrio y dificultades para caminar y mantenerse de pie.
• Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Es una de las patologías crónicas con mayor prevalencia (afecta al 11,8% de los mayores de 40 años en España) y que produce dificultades para respirar.
• Pacientes con cáncer, con poco apetito o con problemas para comer.
• Pacientes geriátricos frágiles.
• Personas con disfagia. Un trastorno de la deglución, el mecanismo por el cual el ser humano hace pasar el alimento, la saliva y los líquidos desde la boca hacia el estómago de una forma eficiente y segura. Es grave ya que, con independencia de las otras patologías en curso, puede provocar la muerte en un paciente crítico.
• Ictus.
• Parálisis cerebral.
• E incluso en niños con alergia a las proteínas de la leche de vaca.
• Prematuros.

Nutricia: "Esencial para el cuidado de la salud"

La doctora Rocío Martín, farmacéutica y directora ejecutiva de Ciencias Médicas y Nutricionales en Early Life de Danone Nutricia, explica que:

• “El objetivo es ofrecer soluciones nutricionales especializadas donde la nutrición es esencial para el cuidado de la salud”. 

Son declaraciones realizadas durante una visita al centro Danone Nutricia de Países Bajos, situado a 40 kilómetros del suroeste de la capital, Ámsterdam, que con diez años a sus espaldas se ha convertido en una sólida red de centros de investigación y desarrollo. 

Con cerca de 500 empleados, se ha situado en uno de los puntos neurálgicos donde se ofrece instalaciones de última generación, como laboratorios de ciencia y tecnología, una planta piloto para producción a pequeña escala y un laboratorio sensorial que cuenta con la participación de pacientes y familiares.

Y todo ello con un único objetivo: dar respuesta a las necesidades nutricionales especiales de cada paciente en todas las etapas de la vida.

Pero como subraya Lucía Martínez, Marketing ¬ Healthcare Strategy Director de Danone, se trata de “innovación avalada por la comunidad científica y basada en la ciencia tomando como base

• Conocimientos científicos y tecnológicos
• Investigación clínica
• Experiencia de usuario
• Desarrollo de productos
• Tecnologías de procesos
• Innovaciones en envases”.

“Cuando su salud se ve comprometida, la nutrición médica puede desempeñar un papel esencial en la mejora de esta y de su calidad de vida”, recalca Martín.

¿Cómo evitar enfermedades desde la primera etapa de la vida?

Como indica el doctor Guss Roeselers, “el desarrollo de la microbiota (conjunto de bacterias que colonizan la piel, el aparato digestivo, incluida la boca, y el aparato genital) en la primera infancia ofrece una oportunidad única para mejorar la resiliencia inmunitaria a travésde la nutrición”.

Un microbioma comprometido, ya sea debido a un parto por cesárea o a la administración de antibióticos en las primeras edades:

• "Supone un riesgo de desarrollar infecciones en la infancia, así como de enfermedades no transmisibles en otras etapas futuras de la vida”.

La leche materna, que es otra de las disciplinas que se estudian en este centro situado en los Países Bajos, destaca el doctor Bernd Stahl, “existen diferentes estrategias nutricionales para apoyar el sistema inmunitario infantil a través del intestino con, por ejemplo, PREbióticos, POSTbióticos y SIMbióticos”.

• “Nuevos datos sobre la influencia de la nutrición, la genética y el estilo de vida en la composición y los beneficios de la leche materna aportarán nuevos conocimientos sobre las necesidades de nutrición materna e infantil”.