Las mascarillas han pasado a formar parte de la vida cotidiana de los ciudadanos, y por eso se han popularizado los puntos de venta donde se pueden adquirir o las diferentes maneras en las que se pueden comprar, vendiéndose diseños que nos acompañen de manera estética con dibujos, los colores de tu equipo de fútbol, o estampados pintorescos.
Una de las nuevas modas en las que están cayendo muchos de los usuarios de la mascarilla es la de coser, pintar o maquillar las mascarillas, algo que reduce a cero la efectividad de la misma. Según ha explicado la farmacéutica Marián García en su popular cuenta oficial de Instagram, cuando se manipula una mascarilla sujeta a un estándar de fabricación y seguridad, te lo cargas completamente. Así lo explicaba a través de una comentada publicación.
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"Es como si te compras unas gafas graduadas y te dedicas a pulir en tu casa sus cristales", reconocía la experta. La profesional también señalaba que las mascarillas no son un complemento estético, sino de seguridad.