La desescalada requiere que cada país vigile con cautela los avances que se van produciendo: un pequeño repunte en cualquier territorio puede provocar que todo el estado registre un nuevo brote de coronavirus que obligue al confinamiento total, y este es el motivo por el que en España, este proceso está siendo lento, gradual y asimétrico. En Alemania, hay estados en los que se ha permitido antes la reapertura de restaurantes (pese a tener restricciones de aforo), siendo uno de estos Baja Sajonia.
Es allí donde se ha observado un pequeño repunte de contagios asociado a un brote surgido en un mismo restaurante: después de que en la localidad de Leer no se registrase ningún caso en la última semana, se han detectado 9 personas que se han infectado presuntamente en un mismo restaurante. Otros 50 ciudadanos, todos ellos contactos estrechos de los pacientes, han sido puestos en cuarentena preventiva.
Pese a que una portavoz de la Dehoga (Federación de Hoteles y Restaurantes Alemanes) ha asegurado que dadas las medidas de distanciamiento social y de seguridad que hay en los locales es imposible que se hubieran contagiado en este espacio, un equipo de rastreadores se encuentra investigando si el restaurante ha incumplido algunas de ellas, o si uno de los trabajadores era el 'paciente cero'.
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En España, los restaurantes y bares en Fase 1 solo pueden abrir la terraza con el 50% de su aforo, mientras que aquellos que se encuentren en Fase 2 podrán añadir el 30% de aforo del interior, sin contar las barras, que siguen estando prohibidas.