Llevamos semanas escuchando que España se encamina hacia un panorama desalentador en lo que a la pandemia de Covid-19 se refiere; en parte es así, porque sumamos casi 30.000 contagios diarios desde hace varias jornadas, y claro, la presión asistencial comienza a aumentar. Pero a pesar de que somos uno de los países con mejor cobertura vacunacional, más de un 50% con la pauta completa y un 62% con al menos una dosis, sigue habiendo un buen número de personas no inmunizados, y he aquí el problema.
Carolina Darias, en la última rueda de prensa que ha ofrecido como Ministra de Sanidad, ha comentado que "en las últimas 5 semanas, el 5,5% de los contagios se han dado en personas completamente vacunadas, y el 11,4% con una sola dosis". Es decir, en torno a un 83% de las personas infectadas por la Covid-19 no han recibido vacuna alguna, o bien son negacionistas (o ambas cosas, claro).
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Los jóvenes son los grandes vectores del virus en esta quinta ola (o cuarta, o enésima, como queráis), y por ello la presión sanitaria no se está desbordando como en anteriores ocasiones. 400 ingresos diarios cuando hemos llegado a tener 4.000; pero claro, hay adultos sin vacunar que también están enfermando y que copan los hospitales y las UCIs, por lo que nos preguntamos si no hubiera sido más idóneo comenzar a inmunizar a los menores de 40 todos a la vez para evitar la transmisión descontrolada de la Covid-19 en algunos sectores.