Zinedine Zidane se queda sin Eduardo Camavinga, uno de los objetivos prioritarios que tenía en mente el preparador madridista para su próximo proyecto deportivo. El joven centrocampista seguirá como mínimo una campaña más en el Rennes, según ha ratificado el presidente Nicolas Holveck en la vuelta del equipo a la actividad tras la suspensión definitiva de la competición en Francia por el coronavirus.
Las palabras de Holveck es un duro golpe para el Real Madrid, y en especial para su entrenador, que habían apostado fuerte por el joven jugador, que a sus 17 años todos intuyen que tiene un gran futuro. Zidane lo quería para dar descanso a Casemiro. El conjunto blanco, no obstante, no estaba dispuesto a pagar las exigencias del Rennes por desprenderse de su futbolista.
La pandemia de coronavirus ha desatado una importante crisis que también ha llegado al fútbol. "Estamos en una crisis espectacular", ha dicho el dirigente galo en una rueda de prensa. "Creo que no habrán grandes movimientos en el próximo mercado de transferencias", añadió. Según Holveck, el Rennes "no ha fijado un precio por Camavinga, pero ya hemos decidido que seguirá con nosotros porque queremos construir un proyecto ambicioso", apuntó. El Rennes ha finalizado en la tercera plaza tras la suspensión de la competición liguera.
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El franco-angoleño ha participado en la vuelta a la actividad del Rennes, trabajando con normalidad a las órdenes de Julien Stephan. Camavinga no se moverá, el Madrid tendrá que esperar... como mínimo una temporada más.