Florentino Pérez hizo la promesa de “españolizar la plantilla” cuando llegó a la presidencia del Real Madrid. El ejecutivo blanco ha cumplido ese objetivo con pulcritud, fichando jugadores nacionales en su segunda etapa o recuperando canteranos que destacaban en otros equipos. En total ha reforzado el equipo con 24 jugadores: 11 fichajes, otros 11 reenganchados y dos ascensos del filial que han teñido de españoles la plantilla.
La temporada pasada se imponían en la plantilla los jugadores españoles sobre los extranjeros: 13 nacionales y 10 extranjeros. Sin embargo, con la vuelta de Zidane al banquillo esa tendencia empieza a desaparecer ante el olfato personal del francés, cuyas preferencias futbolísticas no encajan con el perfil del jugador nacional. De los 13 dos ya no están, Llorente y Reguilón. Otros tres que estaban cedidos no volverán: Óscar, De Tomás y Mayoral, y otros cinco o seis están en la rampa de salida: Ceballos, Vallejo o Nacho, Isco, Lucas Vázquez, Mariano.
SE IMPONE LA LEGIÓN EXTRANJERA
La plantilla del Real Madrid pasará de tener muchos más jugadores españoles a ser triplicados por los extranjeros. De los 13 de la temporada pasada se quedarán en 6, o 7 si Isco continúa, y la tropa foránea pasará de 10 a 17 de los 23 o 24 jugadores que Zidane quiere tener en el equipo. Un cambio radical que pone coto a esa españolización que Florentino Pérez prometió y cumplió hasta ahora.
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Estos son los 11 refuerzos nacionales de Florentino Pérez desde el 2009: Brahim, Odriozola, Ceballos, Vallejo, Asensio, Isco, Illarramendi, Canales, Pedro León, Xabi Alonso y Albiol. Los 11 reenganchados son: Carvajal, Lucas Vázquez, Mariano, Morata, Mayoral, Casilla, Diego López, Callejón, Arbeloa, Granero y Llorente. Y los dos que subieron del Castilla: Nacho y Reguilón.