En las oficinas del Santiago Bernabéu han saltado las alarmas al ver las fotografías de los tres agentes armados de la Agencia Tributaria Aduanera abordando este martes en aguas de Formentera el yate que tiene alquilado el delantero del Real Madrid Cristiano Ronaldo. Sólo hay que recordar que cada vez que el portugués sufre un contratiempo, protagoniza una pataleta y sus voceros se encargan de proclamar a los cuatro vientos que la indignación del jugador y su amenaza de abandonar el club madridista.
La exclusiva de la revista Hola ha dado la vuelta al mundo. La visita sorpresa de los tres agentes aduaneros al barco donde Cristiano, su novia, Georgina Rodríguez, y el resto de su familia y amigos está pasando las vacaciones en Ibiza, sobresaltó sobre todo a Florentino Pérez, presidente madridista, que se acostumbrado a las reacciones airadas del delantero cada vez que afronta una adversidad en su vida.
espantadas
Sólo hay que recordar su última espantada tras conocerse la decisión de la Fiscalía de Madrid de denunciarle por haber defraudado supuestamente 14'7 millones de euros a la Hacienda pública o aquella rabieta que protagonizó nada más arrancar la temporada 2012/2013 -"estoy triste y la gente del club ya sabe por qué", dijo entonces- y que se solucionó con una importante mejora de contrato al año siguiente.
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Ni siquiera el hecho de que se trató de una inspección rutinaria de la embarcación para comprobar el impuesto de matriculación del yate ha calmado los ánimos en las oficinas del club madridista. Todo el mundo sabe lo sensible que es Cristiano y cómo se las gasta cuando está enfadado. Tras su último enfado filtró a la prensa de su país que estaba indignado y que su decisión de abandonar el Real Madrid era irreversible. Ha pasado casi un mes desde que su amenaza apareció en la portada del diario 'A Bola' y el jugador portugués sigue en nómina del club madridista.