El Real Madrid - Celta no estuvo exento de tensión y así se pudo comprobar en la segunda mitad, cuando el partido empezó a animarse. Así se pudo comprobar en los constantes rifirrafes que tuvieron entre Iago Aspas y Sergio Ramos.
Todo empezó mediada la segunda parte, en el minuto 60, cuando tras pugnar los dos por un balón el defensa madridista acabó por los suelos. Ramos se levantó y se lanzó a por el delantero vigués con muy malas maneras. Tanto, que uno de los improperios que soltó por su boca provocó una reacción airada en Aspas, que se encaró con Sergio Ramos cara contra cara. Tras unos segundos de tensión los dos jugadores se fueron cada uno por su lado... sin que Fernández Borbalán hiciera nada al respecto - Sergio Ramos ya tenía amarilla desde el minuto 6 de la primera parte.
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La cosa no quedó ahí. Minutos más tarde los dos protagonistas volvieron a enzarzarse. En esta ocasión, Sergio Ramos golpeó con la mano a Aspas en un salto entre ambos. El árbitro tampoco señaló nada a pesar de que el delantero gallego se dolió de manera ostensible. La repetición, en este caso, mostró que Aspas había exagerado el contacto.