El Real Madrid ha hecho el último entrenamiento antes del partido de ida de los octavos de final de la Champions, ante el PSG. Los de Ancelotti se han ejercitado en el Parque de los Príncipes con la gran incógnita de estado de Karim Benzema, que llega al choque tras varias semanas de lesión.
Tal como han afirmado tanto el propio jugador, como el técnico italiano, las sensaciones del francés en el entreno de este lunes serán decisivas para la decisión final de si juega o no, y si podría hacerlo desde el inicio.
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Benzema ya ha afirmado en la rueda de prensa previa que está mentalmente preparado y dispuesto a forzar si el equipo y los entrenadores así lo creen oportunos, pero también son conscientes de que no forzarán si hay el más mínimo riesgo de una recaída.