El Liverpool acecha con determinación a Rodrygo

Es el elegido en caso de que Salah no continúe, aunque su fichaje va a depender de lo que diga el jugador porque el Madrid no quiere venderlo

Real Madrid - Alavés : El gol de Rodrygo

Alejandro Alcázar

Rodrygo Goes sigue en las agendas de equipos importantes de la Premier, con el Liverpool a la cabeza. Los ‘red’ llevan varias temporadas acechando al brasileño, pero no acaban de dar el paso definitivo. Sin embargo, la posibilidad de que el egipcio Salah salga en verano, hará que busquen un relevo de primera línea y Rodrygo es el jugador que quieren para reforzar el ataque.

Rodrygo es un tipo discreto dentro y fuera del campo. Sin embargo, en los últimos meses ha querido reivindicarse con declaraciones a destiempo que no han gustado ni en el Real Madrid ni en su entorno. En el club creen que donde debe reivindicar su figura es sobre el césped. Él se ha puesto a ello con un inicio de temporada prometedor, en el que nada tiene que envidiar a sus galácticos compañeros de línea.

Apoyo de Ancelotti

Ancelotti siempre ha sido un defensor a ultranza del brasileño. Pese a ser delantero, se transforma en centrocampista para ayudar a sus compañeros en una labor valorada por el italiano. Tanto, que lo ha mantenido en ataque junto a Vinicius y Mbappé, y lo ha hecho sabiendo que perdía equilibrio en el juego. Sigue apostando por el 4-3-3 y no por un sólido 4-2-2 pese a las dudas.

Mbappé, Vinicius, Bellingham y Rodrygo celebran un gol / @Vinijr

Sin embargo, de los cuatro jugadores fijos en ataque en los que confía el italiano, es el más cambiado: 6 veces en los 7 partidos que salió de titular; Vinicius, 5 de 8; Mbappé, 5 de 9 y Bellingham, 4 de 5. Quizá sea porque se desgasta más que sus compañeros, pero solo ha jugado un partido completo de los nueve disputados. En goles, compite con sus dos compañeros de Línea: lleva 3, pero no tira los penaltis; Vinicius ha marcado 3, dos de pena máxima, y Mbappé 7, 3 desde el punto fatídico.

Las dudas del brasileño

El futuro de Rodrygo está en su mano. Tiene contrato hasta 2028 y el Madrid se niega a negociar su traspaso. Él asegura que quiere seguir, aunque sus declaraciones altisonantes puedan indicar lo contrario. Solo en el caso de que pida irse, Florentino Pérez escucharía ofertas, pero no lo venderá por menos de su valor de mercado, 110 millones de euros e incluso exigiría una cantidad mayor por ser un jugador joven, 23, con muchos años de un rendimiento alto por delante.

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El Liverpool tendría que rascarse el bolsillo. Primero, con una oferta que satisfaga al Real Madrid y luego, con un salario que supere al que cobra en el club blanco, 12,5 millones de euros brutos por temporada, aunque con subidas anuales. El balón está en el tejado del jugador, que va a depender de si se siente útil, valorado y querido en el Real Madrid. De lo contrario podría plantearse su futuro: “¿Seguir en el Madrid para siempre? Sí, bueno... Todo puede pasar. Tengo contrato aquí, pero... los años que ya he estado aquí fueron un placer para mí”.

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