El feo y provocativo gesto de Cristiano Ronaldo a los espectadores del Nuevo Arcángel tocándose el escudo de Campeón del Mundo mientras se retiraba del terreno de juego al ser expulsado es comparable al que hizo en 1990 Hugo Sánchez a la afición del Camp Nou.
En aquella ocasión, el exdelantero mexicano del Real Madrid se llevó sus manos a las partes "nobles" al término de un encuentro que el Real Madrid ganó por 0-1 y que estuvo marcado por la polémica: Cruyff y Stoichkov vieron la tarjeta roja.
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Tras el encuentro, Hugo Sánchez dijo no haberse tocado nada ni querer ofender a nada. Además de no pedir perdón, tampoco fue sancionado. Por su parte, Cristiano Ronaldo sí se disculpó a través de Twitter, aunque ello no le librará de una sanción, como mínimo, de dos partidos, no tanto por su gesto sino por sus dos agresiones: la primera -a Crespo-, que quedó impune, y la segunda, que sí fue castigada.