Eden Hazard rechazó, durante su etapa en la Ligue 1, a la selección francesa para jugar con Bélgica. Desde entonces, el belga es una de las estrellas del combinado dirigido por Roberto Martínez.
El debut de Hazard en la liga francesa se produjo con tan solo 16 años y, a medida que sumaba partidos, fue despertando el interés de la Federación Francesa hasta el punto de querer conseguir su nacionalización. "Cuando jugaba en el Lille, hablamos un poco con la Federación sobre la posibilidad de que jugara con Francia. Pero yo soy belga, nací en Bélgica y por ello decidí jugar con la selección de mi país", afirmó.
La decisión de representar a la selección belga le ha llevado a ser, ahora mismo, el capitán tras sumar 104 partidos, en los que ha marcado 30 goles. El futbolista del Real Madrid había pasado por las categorías inferiores de Bélgica antes de negarse a jugar para el conjunto galo.
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Francia se volvería a cruzar en el camino de Hazard en las semifinales del Mundial de Rusia, donde habría podido acabar como campeón del mundo si hubiera aceptado la proposición.