Sergio Ramos y Lucas Vázquez estaban con un pie fuera del Real Madrid. No aceptaban las ofertas de renovación recibidas y estaban dispuestos a irse. Sin embargo, la situación ha dado un giro inesperado en la última semana. El capitán está dispuesto a aceptar la propuesta económica a la baja que el ofrece el club, pero pide dos años de contrato. Por otra parte, el club cede y eleva la oferta económica inicial que hizo al canterano.
Sergio Ramos y el Madrid han acercado posturas. El jugador no aceptaba la propuesta extendida por el club, que mantenía el sueldo que cobraba con la rebaja del 10% asumida la temporada pasada por la crisis y otra segunda de la misma cuantía. Cobra 11,7 millones, menos el 10% esta temporada que se queda en 10. Y otro 10% de rebaja que deja el sueldo en 9 netos más 2 en incentivos.
ROMPER LA TRADICIÓN VALE 22 MILLONES
El capitán aceptaría la oferta, pero pide dos años de contrato. Tiene 35 años y la norma no escrita del club es renovar año a año a los mayores de 30. La petición del capitán manda el balón al tejado del club, que tiene que decidir si cede y rompe la regla o la disfraza con una oferta de un año más otro. Al Madrid le puede costar mantener al sevillano unos 22 millones de euros que serían 44 en dos años por un jugado que esta temporada se ha perdido la mitad del curso por las lesiones.
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Lucas Vázquez tampoco aceptó la oferta a la baja que le hizo el Madrid. Como a Ramos, le daba el mismo sueldo que tenía con las dos rebajas salariales del 10% que dejaban su salario inicial de 3,5 millones en menos de 2,8 millones. El club reconoce que su rendimiento está por encima de lo que cobra y ha subido a los 5 millones netos que satisfacen al jugador, según ‘As’, más tres años de contrato. Todo indica que seguirá pese a que tiene ofertas similares e incluso superiores de otros clubes.