El Levante - Real Madrid se instaló en el escándalo por la decisión del árbitro gallego Iglesias Villanueva que no le corrigió el VAR y supuso el 1-2 de los blancos en el momento decisivo del encuentro de la jornada 25 de LaLiga Santander 2018 - 2019.
Corría el minuto 76 y el partido estaba igualado, con más acciones ofensivas del Levante que del Real Madrid, pero llegó la jugada clave de cada partido disputado por los de Solari.
Casemiro, en un auténtico piscinazo dentro del área de Aitor, se cayó al suelo al ser rozado por Doukouré, que apenas le tocó, y el colegiado silbó penalti instantáneamente.
Pese a consultar con el VAR por vía auditiva, el árbitro gallego no se echó atrás y de paso el Real Madrid se fue hacia adelante a por un triunfo que puede resultar decisivo para no alejarse más del líder FC Barcelona.
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Lamentable y de vergüenza ajena un día más, una jornada más, pitando los árbitros y el VAR al unísono a favor de los blancos. Incomprensible e inadmisible en una Liga considerada de primer nivel. Sin explicaciones posteriores, a diferencia, al menos, de lo que pasó en la UEFA contra el Ajax.