Casemiro, Kroos y Modric, el trivote mágico del Madrid

En un mundo globalizado intentan imponer la estadística a las sensaciones que dejan en el paladar del aficionado las actuaciones de los jugadores. Inventan logaritmos para medir el rendimiento y se atreven, incluso, a dar premios a los que obtienen mejores notas. Pero el seguidor al fútbol sigue sus propios parámetros y el más importante es el de divertirse, un exponente que no hay cerebrito que lo mida. Y si no que se lo pregunten a los madridistas con su trivote mágico formado por Casemiro, Kroos y Modric.

Tres tipos con estilos muy diferentes. Dos juegan con la cabeza alta y el tercero con los pies a ras de suelo. Llevan siete temporadas pasándoselo bien juntos, aunque Casemiro, el de los pies a ras de suelo, tenga otra misión a la de sus dos compañeros, ser su guardaespaldas y el de todo el equipo. No tiene tan desarrollado el don del pase ni del regate pese a ser brasileño. Pero en toda asociación tiene que haber alguien que haga el ‘juego sucio’ y Casemiro es un experto en lo suyo. Su fútbol contrasta con su inteligencia, con una cabeza bien amueblada.

ELLOS SON EL BAILE

Kroos es otra cosa. Un tipo de pecho alto, técnica depurada y una visión de juego que sincroniza con el futuro. Su calidad de pase hace bailar al equipo de un lado a otro, en perpendicular o diagonal, en corta, media o larga distancia si el compañero busca el espacio. Y Modric es la creatividad apoyada en una danza invisible. El rival es un tiovivo que va y viene con sus amagos sin necesidad de tocar el balón. Porque el balón es suyo. Lo compró él. Tres tipos que se complementan y que, además, dan lustre a esas estadísticas que hacen del Madrid un equipo más sólido. Una estadística ‘a tres’ sin medir, porque los cerebritos solo han inventado el logaritmo individual.

Ancelotti no pudo ponerlos juntos este curso hasta el 19 de octubre por la baja de Kroos. Desde entonces, han jugado juntos 16 partidos con pleno en los 10 primeros (10 triunfos). Con ellos el Real Madrid ha ganado el 89,5% de los puntos, superando en 9,3% la media del equipo: 80,2%. Con ellos han ganado 14 partidos, empatando y perdido uno: 43 de los 48 puntos. A eso suman una mejora en la efectividad goleadora con 2,3 goles por partido (2,2 en el global) y 0,68 en contra (0,82 en el total). Han jugado juntos los 90 minutos de cuatro partidos y ganaron los cuatro: 1-2 ante el Barça; 2-1, con el Shakhtar; 2-0 al At. Madrid y 0-2 ante el Athletic en la final de la Supercopa. El único problema es que no son máquinas y la edad pesa: Modric, 36 años; Kroos, 32 y Casemiro, 29.