Gareth Bale sigue desesperando al madridismo. Su reaparición en el once titular del Real Madrid ante el Mallorca en Valdebebas de poco le ha servido al delantero galés para cambiar de opinión a los aficionados madridistas o, al menos, convencer a su entrenador Zinedine Zidane. Su actuación ante el Mallorca fue para olvidar. El delantero galés estuvo ausente, se paseó por el terreno de juego y se comprobó que sigue viviendo de renta de sus goles 'mágicos' en la Champions.
Después de casi cuatro meses sin ser titular en el Real Madrid, Gareth Bale fue la gran novedad del equipo ante el Mallorca. Su actuación, sin embargo, fue para olvidar. Un único disparo a la portería (minuto 7) fue el pauperrimo balance del galés en este partido. Se le vió ausente, descolocado y con pocas ganas lo que provocó el disgusto de los madridistas que seguían el partido por televisión. En esta ocasión parece que Bale se salvó de una buena pitada como hubiese sucedido en el Bernabéu si no hubiese habido la pandemia de coronavirus.
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Bale acabo siendo sustituido por Zidane a falta de 20 minutos para la finalización del encuentro, sin hacer nada para recuperar la confianza de su entrenador, Zidane, quien cuenta con el apoyo del madridismo en todas sus decisiones con el galés.