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Mientras que el madridismo brama por la jugada entre Rulli y Vinicius durante el Real Madrid-Real Sociedad (0-2) en el que reclama un penalti no señalado sobre el brasileño por el árbitro del partido Munuera Montero, Gareth Bale parece vivir en un mundo paralelo. Lesionado de nuevo, el galés abandonó el Santiago Bernabéu antes de acabar el partido, según recogieron las cámaras de 'El Chiringuito', provocando el disgusto de la parroquia merengue.
Según las imágenes emitidas por 'El Chiringuito', el conocido como 'El Expreso de Cardiff' hizo honor a su apodo y abandonando a toda máquina el Santiago Bernabéu cuando discurría el minuto 78 de partido. El Real Madrid perdía por 0-1, buscaba a la desesperada salvar el resultado y todavía faltaba la parte final del 'Via Crucis': el 0-2 de Rubén Pardo.
Bale, que cayó lesionado en el partido frente al Villarreal, sufre su octava dolencia en el sóleo izquierdo y estará de baja entre dos y cuatro semanas de baja. Es la vigésimo segunda lesión del delantero galés desde su fichaje por el Real Madrid en el 2013.
A Bale se le critica su poca integración -apenas se expresa en castellano, al menos en los actos públicos- y su escasa capacidad de liderazgo pese a la condición de estrella con la que llegó y que se ha reforzado tras la marcha de Cristiano Ronaldo.
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Pero lo que ha molestado más en esta ocasión es su absoluta falta de compromiso, abandonando el estadio de Chamartín con el partido en juego y el equipo en una situación crítica, como si la derrota del Real Madrid ante la Real Sociedad no fuera con él.