El Real Madrid ganó al PSG. Lo hizo con un marcador demasiado abultado, pero el Bernabéu no perdona y no da segundas oportunidades. Los franceses tuvieron su momento y no lo aprovecharon. Los de Zidane, en cambio, sí.
Estas son las notas de los futbolistas del Real Madrid en el partido ante el PSG:
Keylor Navas, portero
Muñeco
Vendido en el gol de Rabiot, durante el resto de partido solo tuvo que estar atento a las llegadas sin disparo final del PSG, que daba más sensación de peligro de la que realmente creaba. Ni bien ni mal.
Nacho, defensa
Agobiado
Neymar no le dejó respirar y, tampoco, le permitió robar balones. Sufrió sin descanso ante las galopadas del brasileño y, además, un rechace suyo acabó en el gol de Rabiot. Flojito.
Raphaël Varane, defensa
Funcionario
Ejerce la función de central como quien archiva documentos en una oficina. Si hay que saltar, se salta. Si hay que pasar, se pasa. Si hay que cortar, se corta. Poco brillo, pero efectivo.
Sergio Ramos, defensa
Débil
Lejos de la contundencia del pasado tanto en defensa como en ataque, Ramos vive del personaje y de su personalidad. Cometió un penalti que en el área parisina habría sido señalado. El capitán blanco tiene bula.
Marcelo, defensa
Paciente
Le costó entender cuándo subir y cuándo guardar la posición. La culpa la tuvo Mbapé, siempre peligroso pese a que sus compañeros le buscaron poco. Pero supo esperar su momento para sentenciar con el tercero.
Casemiro, centrocampista
Mimado
Para los árbitros, que le perdonan una y otra vez la amarilla. Ni por reiteración, ni por exceso, ni por cortar contragolpes... Las faltas de Casemiro nunca merecen la amonestación. Y él, poco a poco, se crece. No es culpa suya, que hace bien su trabajo y cortó muchos ataques del PSG.
Toni Kroos, centrocampista
Piscinero
Lo intentó antes de acabar encontrando premio en el segundo intento. Sufrió un par de lipotimias en el área parisina y el colegiado señaló el punto de penalti en la segunda tras un leve agarrón casi imperceptible de Lo Celso.
Luka Modric, centrocampista
Inofensivo
Tocó y tocó y volvió a tocar. Pero sin encontrar la manera de hacer daño a la defensa del PSG. Seguramente porque el partido requería que jugase algo más retrasado de lo habitual. Hace tiempo que no se reconoce en el espejo.
Isco Alarcón, centrocampista
Cerebro
Es el futbolista más creativo que tiene a día de hoy el Real Madrid y se hartó a mover con criterio el balón. El problema es que le faltaban compañeros de viaje para que los blancos crearan más problemas a su rival.
Karim Benzema, delantero
Insulso
Areola envió a córner la única acción de mérito del francés, un disparo desde la frontal con la zurda. Acabó cambiado porque su actuación fue insuficiente en un partido grande. Una vez más.
Cristiano Ronaldo, delantero
Socorrido
Incapaz de ver puerta pese a probarlo desde cualquier posición y también de falta directa, el árbitro se inventó un penalti a Kroos para que marcara desde los once metros. Sin oposición no perdona. Luego Areola le regaló el segundo. Así cualquiera.
Gareth Bale, centrocampista
Suplente
Fue una de las sorpresas de la noche, aunque Zidane echó mano del galés en la segunda mitad para intentar romper el empate. Eso sí, sentó a Benzema. Bale no es imprescindible.
Lucas Vázquez, delantero
Recurso
Zidane puso toda la carne en el asador como pedía el partido. No cambió el partido por su fútbol, pero sí obligó a echarse atrás al PSG, que ya es mucho.
Marco Asensio, centrocampista
Asistente
Suyo fue el centro que rechazó mal Areola para que marcarse Cristiano Ronaldo el segundo. También asistió para el tercero de Marcelo. No hizo demasiado más, aunque sería pedir demasiado saliendo desde el banquillo