El futuro de Neymar JR sigue estando en el aire. La intención del Paris Saint-Germain y del propio futbolista parece ir encaminada hacia una salida este mismo verano. Tras la reciente noticia del interés del brasileño de regresar al Barça, hay novedades entorno a su situación. Según pudo saber SPORT, la dirección de su casa habría sido filtrada a aficionados del conjunto parisino.
Hace apenas unas semanas, los mismos aficionados del club acudieron a la puerta del domicilio del futbolista, en las afueras de París, a increparle directamente. Esto fue antes de conocerse su interés definitivo por salir del club y fichar por el Barça.
La historia del desencuentro entre Neymar y el PSG se remonta meses atrás en el tiempo, propiciada por los problemas de lesiones del brasileño, su contrato desorbitado, un rendimiento irregular sobre el césped y otros factores.
Su calvario con las lesiones
Desde que fichó por el PSG en 2017, Neymar ha sufrido más de 20 lesiones con el club y ha estado casi más días en la enfermería que sobre el terreno de juego. No le han dejado mostrar el máximo nivel que prometía.
Neymar abandona el pasto en camilla, lesionado
| AFPEsta temporada ha vuelto a encadenar varios problemas físicos que le han impedido ayudar al equipo a conseguir sus objetivos en la Champions. En febrero sufrió una grave lesión de tobillo que le tuvo apartado hasta el final de temporada. Apenas se le ha visto por París.
Un salario desorbitado hasta 2027
Otro de los grandes problemas del PSG con Neymar es su contrato. Hace ya mucho tiempo que en París han perdido la paciencia con él, pero su continuidad hasta 2027 dificulta mucho las negociaciones. El brasileño sabe que fuera no cobrará ni de lejos lo mismo que lo que se lleva actualmente en el Parque de los Príncipes.
Neymar celebrando un gol con el PSG
| EFEActualmente, Neymar sigue siendo uno de los futbolistas mejor pagados del PSG. Sólo por detrás de Mbappé, el delantero brasileño ocupa la segunda posición de los mejores pagados con 3,67 millones de euros brutos al mes. O lo que es lo mismo, más de 40 millones de euros al año.
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A sus 31 años, el jugador es consciente de que deberá hacer un esfuerzo si quiere salir de París y buscar una nueva aventura en Europa para recuperar su mejor nivel. Esta podría ser su última oportunidad.