El Watford-Chelsea fue suspendido momentáneamente por una emergencia médica en la grada. Tal y como sucediera en el Newcastle-Tottenham con Sergio Reguilón, esta vez fue Marcos Alonso el que alertó al colegiado David Coote de lo que estaba sucediendo. El trencilla no lo dudó un instante y detuvo el partido para que las asistencias intervinieran al espectador que había sufrido un paro cardiaco.
Los jugadores de ambos equipos abandonaron el campo en el minuto 12, por un presunto problema médico con uno de los aficionados en la grada de Vicarage Road. El colegiado se llevó a los jugadores al túnel de vestuarios y el encuentro estuvo parado más de media hora. Afortunadamente, los servicios médicos lograron estabilizar al espectador y se lo llevaron al hospital para realizar más exploraciones.