El Liverpool logró vencer en casa por 4-3 al Crystal Palace en un partido que estuvo a punto de atorársele al líder, pero que una equivocación fatal de Speroni terminó por inclinarle la balanza a los de Merseyside que siguen campantes como líderes de la Premier League.
Townsend, como contra el Chelsea y el Manchestre City, sacó el rifle de su zurda a pasear. Zaha encarando por banda izquierda le sirvió el balón al centro al exTottenham, que afiló su remate para clavarlo justo debajo de la humanidad de Alisson y romper el cero en Anfield. Silencio absoluto de los atónicos hinchas del Liverpool, que temían repetir la historia de los 'cityzens'.
Con la impotencia de marcharse así al descanso, los de Jürgen Klopp tenían toda la segunda mitad para remontar el resultado adverso. Salah no quiso dejar pasar ni un minuto y, aprovechando un rebote en el área tras un remate lejano de Van Dijk, el egipcio la tocó con delicadeza y la dejó dormida en la portería de Speroni. Empate y aviso.
Firmino, abonado a la premisa del apuro, espero ocho minutos más para firmar la ventaja de los 'reds'. Firmino, abonado a la premisa del apuro, espero El brasileño se internó con su derecha y remató escorado, provocando un rebote en Kouyaté que iba a desfilar lentamente hacia las piolas del Crystal Palace. Gol anotado al exHoffenheim, que ya suma el octavo tanto en Premier League.
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No iba a ser fácil la victoria para los locales, pues Tomkins puso nuevamente el empate con un cabezazo a los 65'. Pero un héroe 'ineSperoni' le dio los tres puntos definitivos al Liverpool. El error garrafal del guardameta dejó la pelota muerta en la raya y Salah solo tuvo que empujarla. Mané redondeó con el cuarto, que sirvió para contrarrestar el descuento de Meyer.