Alexis Sánchez fue el gran protagonista de la victoria del Arsenal en Hull, anotando dos goles para los gunners y errando un penalti que acabó por no tener consecuencias en el resultado final.
El Arsenal acabó goleando a un rival que no bajó los brazos ni en inferioridad numérica y que solamente se entregó a partir del 1-3 anotado por el chileno.
El equipo de Arsene Wenger, un día después de conocerse que el entrenador abandonará el cargo al acabar la temporada, se adelantó poco después del cuarto de hora por medio del delantero chileno, controló con comodidad el juego pero no pudo trasladar su dominio al marcador, llegando a fallar un penalti Alexis en una jugada que había motivado la expulsión de Livermore y daba a entender un segundo tiempo muy cómodo para los gunners.
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Más aún lo pareció cuando Walcott puso el 0-2 a los diez minutos de la continuación, sin sospecharse el sufrimiento que padecerían cuando Snodgrass acortó distancias. La fortuna, sin embargo, sonrió a Wenger con el tercero de Alexis y el cierre de Xhaka, ya cuando el partido estaba totalmente sentenciado a su favor.