El victoria del Manchester City ante el Oporto (1-0) en la jornada inaugural de la fase de grupos de la Champions League ha dejado secuelas.
Los banquillos de ambos equipos se enzarzaron durante el partido y el entrenador de los 'dragoes', Sergio Conceiçao, acusó a Pep Guardiola de provocar el enfrentamiento.
No ha sido la única polémica que han denunciado desde las filas portuguesas. El central Pepe ha señalado al colegiado, el letón Andris Treimanis, y al VAR como responsables de la derrota del Oporto.
El exdefensa del Real Madrid se refiere al penalti cometido por él mismo sobre Sterling con el que el City restableció la igualdad en el marcador, a una posible falta de Fabio en el 2-1 y a algunas acciones de Cancelo y Rodri que, a su juicio, deberían haber dejado en inferioridad al conjunto de Manchester.
"El arbitro y el VAR se equivocaron", asegura un Pepe que desgrana sus quejas: "El penalti, la falta de Cancelo, que sería la segunda amarilla, también la segunda amarilla a Rodri... incluso la jugada con Fabio antes del segundo gol del City, que pudo ser falta".
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"Perder así cuesta, porque con la tecnología que tenemos hoy en dia, que el VAR no capte la atención del árbitro es inaceptable", lamentó un Pepe que concluyó: "El resultado fue completamente injusto. El City tiene muy buenos jugadores y no necesitaba esta ayuda".