El partido entre el Newcastle y el Tottenham de este 17 de octubre de la Premier League fue detenido por el colegiado Andre Marriner en el minuto 39 por una emergencia médica en la grada.
Reguilón y Dier advirtieron al árbitro de la situación y las asistencias sanitarias asistieron inmediatamente para socorrer al aficionado.
El árbitro inglés suspendió el partido y mandó a los dos equipos a los vestuarios durante unos minutos.
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Los servicios médicos del club han conseguido estabilizarle y ya va camino del hospital. "El seguidor que ha necesitado ayuda médica urgente ha sido estabilizado y va camino del hospital", asegura el último comunicado del Newcastle.