Las alarmas en el Manchester United se encendieron en el minuto 73 de partido en el Etihad. No precisamente por el resultado, ganaban 0-2 al casi imbatible Manchester City. Marcus Rashford, referencia de los ‘red devils’ junto a Bruno Fernandes, pedía el cambio tras notar un dolor severo en su tobillo.
Quiso recuperar el balón con un ‘sprint’ hacia atrás pero terminó con un golpe en su tobillo que no tenía buena pinta sobre el césped. Necesitó las asistencias y tuvo que ser sustituido. Las pruebas médicas han rebajado el nivel de preocupación dentro del club.
Pese a tener la zona hinchada y con hematomas, el tobillo de Rashford no sufre ninguna rotura de ligamentos, el peor de los pronósticos. Es el golpe.
Duda ante el Milan
Descartada la rotura, el tiempo de baja del delantero inglés es ahora mismo incierto. En Inglaterra no lo descartan para llegar al partido de mañana ante el Milan pero la realidad es que lo tiene crudo. Solskjaer no parece que vaya a forzar la presencia de Marcus en la que será la ida de octavos antes los ‘rossoneri’.
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El United llega a la cita pleno de moral tras romper la racha de victorias de su rival en Manchester. El único ‘hándicap’, el partido de ida es en Old Trafford.