¿Qué sería de nuestra vida sin las noticias ‘random’ que nos llegan de Inglaterra? Desde porteros que comen pizzas en el banquillo en la FA Cup, a equipos veganos con propietarios ‘hippies’, de todo. Y, como no podía ser de otra forma, recientemente nos llegó la del retorno de un mito, una leyenda en Inglaterra como Peter Crouch a la máxima categoría.
La Premier League vuelve a oler a fútbol ‘vintage’ con el regreso del gigante. Muchos le habían perdido la pista, pero lo cierto es que seguía en el Stoke City, con el que descendió la temporada pasada en la Championship. De hecho, ahí seguía compartiendo vestuario con Bojan Krkic hasta que el Burnely decidió proponerle volver a la élite para sumarse a la cruzada por la permanencia. El equipo que dirige Sean Dyche está inmerso en la lucha por la salvación en una primera categoría del fútbol inglés que está al rojo vivo tanto en la parte alta como en la zona baja.
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Crouch, que acaba de cumplir 38 ‘tacos’, no dudó en acudir a la llamada a filas para recalar en el que supone su undécimo equipo de su carrera. Burnley, una ciudad gris y decadente para, quién sabe, la última aventura del ‘espárrago’. En su ‘redebut’ en la Premier Peter entró en el terreno de juego en el 75’ y con su equipo perdiendo 0-1. Tiempo suficiente para provocar un penalti a escasos 20” para el final que acabaría suponiendo el 1-1 definitivo ante un rival directo como el Southampton. Siguen dos puntos por encima de la ‘quema’ los ‘Clarets’. Con Crouch los finales de partido van a ser más británicos que nunca en Turf Moor.