La única pega de Morata

Vaya por delante que Morata es un gran delantero centro, buenísimo, pero no es Luis Suárez ni ninguno de los cuatro o cinco arietes top que todos tenemos en la cabeza. Es un buen delantero centro para un equipo como el Atlético o el Valencia pero no, como se ha demostrado, para otros equipos como el Madrid o el Chelsea. Aún así, la cuestión es saber para qué necesita el Barça a Morata. ¿De cuarto delantero?, aunque eso de cuarto, teniendo a Coutinho/Dembélé y Malcom ya queda un poco desfasado, pero bueno, entendiendo por cuarto delantero al goleador suplente, puro y duro, pues perfecto.

El problema es que Morata acepte ser suplente, que me parece que va a ser que no. Por lo menos, su historial eso indica. Se quiso ir del Madrid porque no jugaba y se quiere ir ahora del Chelsea porque tampoco juega. Y qué quieren que les diga, si en estos equipos se ha sentido incómodo y ha creado problemas porque no jugaba, en el Barça, con Messi y Suárez por delante, su situación no va a cambiar. 

LA OPERACIÓN 

Vayamos a los términos de la operación. A tenor de lo que ha filtrado el Sevilla y de lo que negocia el Atlético, parece que las condiciones económicas son de aúpa. ¿Lo quieres cedido hasta final de temporada? Prepara entre doce y quince millones. ¿Lo quieres comprar o con opción de compra? Prepara cincuenta millones. De nuevo, la pregunta: ¿para qué lo quiere el Barça? ¿De parche para cinco meses o con vocación de futuro? Si es de parche, parece carísimo. Si es para tenerle tres o cuatro años para tener un buen elemento de rotación, me parece una gran opción. Marcará goles y será un recambio de garantías. Pero la única pega es que tendremos que fiarnos de que aceptará este rol que no ha aceptado en el Madrid ni en el Chelsea, de que ya tiene asumido que en un equipo grande, grandísimo, nadie le va a garantizar los minutos que él aspira a tener y mucho menos será el referente en los partidos importantes y decisivos de la temporada.