Hay un mantra según el cual no hay que mezclar deporte con política que va emergiendo de vez en cuando. ¿Pero es aplicable por igual a todo el mundo? La pregunta viene a colación por la entrevista que Rafa Nadal concedió este jueves a “El Hormiguero”, una presencia en plató que fue un bombazo.
El deportista, como pudimos comprobar semanas atrás con Bertín Osborne, es un invitado perfecto, empático, encantador, simpático mientras que Pablo Motos es un crack del entretenimiento que trató a su invitado con mayor suavidad que de costumbre. Jugaron con él pero no se pitorrearon de él puesto que en el aire flotaba un plus de respeto. Así las cosas la conversación fue discurriendo sobre asuntos diversos como el coronavirus, las lesiones o la competitividad hasta que llegó la última pregunta, una cuestión aparentemente espontánea e inocua que Motos le soltó a bocajarro “¿si tu pudieses cambiar algo de España, en este momento y para el bien de todos, qué cambiarías?”.
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Nadal respondió “no te lo puedo decir”, ambos estallaron a carcajadas, se abrazaron y por si no había quedado claro Motos remató “está todo dicho, eh?”. Pues sí, está todo dicho. No se puede mezclar deporte y política a no ser que se piense de un modo determinado.