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Primer objetivo: reilusionar

OPINIÓN

Ernesto Valverde, en una imagen de archivo / | sport

Valverde prepara ya las maletas y todo está a punto para anunciarlo el próximo lunes tras la reunión de la junta directiva. Falta solo la firma para formalizar el acuerdo pero lo cierto es que el que será el nuevo entrenador del club ya trabaja pensando en el futuro. Antes de que se anuncie oficialmente y empiece la cascada de fichajes, rumores y candidatos a mejorar la plantilla, el club debe consensuar un diagnóstico interno para no repetir errores. De puertas afuera, Bartomeu afirma que la temporada ha sido “muy buena” para no hacer la herida más grande, aunque la afirmación es tan atrevida que no tiene credibilidad: es imposible que sea “muy buena” una temporada en la cual se conseguirá como máximo un título menor con la que fue calificada en su día como “mejor plantilla de la historia del Barça”. No hace falta engañarse: algo ha fallado. Y si se ha fallado es por causas multifactoriales: los fichajes que no han rendido como se esperaba, una actitud preocupante en algunos partidos clave, una hiperdependencia del tridente que ha derivado en la pérdida progresiva del juego de medio campo, la escasa confianza en La Masia, los mensajes de Luis Enrique que ya no han cuajado como en el primer año o no tener ningún sustituto de garantías para jugadores clave como Iniesta o Busquets, entre muchos otros. El diagnóstico y el consenso sobre las causas de los errores es básico para actuar correctamente en las próximas semanas. Pero no es suficiente: porque hay un intangible, del que por cierto se habla muy poco. Se llama ilusión. Se llama entusiasmo. Se llama capacidad de seducir. Al Barça lo envuelve hoy una inquietante frialdad institucional, que sirve quizás para proteger a la junta, pero que no ayuda a encontrar alianzas necesarias en un momento delicado. No todo es la disyuntiva entre derrota o victoria: hay que explicar un proyecto, compartirlo y transmitirlo con fe y energía.  Si esto no se hace por arriba tendrá que ser tarea, una vez más, del entrenador. Este debe ser su primer objetivo: reilusionar.