Lo tiene claro. Bartomeu quiere ganarlo todo. Quiere la Champions y la
liga de futbol pero también la de baloncesto y todos los títulos de
las secciones. Todo. Quiere salir por la puerta grande y va a por
todas. Sabe que este año se lo juega y está dispuesto a arriesgar al
máximo. Así lo cuentan algunas de las personas más cercanas al
presidente. Bartomeu ya no es aquel ejecutivo prudente que cualquier
padre le hubiera dejado su hijo un fin de semana. Ahora, el presidente
vive la vida intensamente y arriesga más que asegura. Su talante ha
cambiado.
La parte deportiva
En el terreno deportivo ha asumido la dirección y solo él sabe hoy si
acabará pagando lo que no tiene por Neymar. Le ofreció al presidente
del PSG un intercambio por Coutinho pero los catarís ni contemplaron
la opción. No obstante, no descarta pedir un nuevo crédito para poder
ofrecer a más jugadores y un buena cifra de dinero. Bartomeu sabe que
Neymar puede ser una bomba de relojería pero sabe también que es un
futbolista decisivo. Y no solo eso. A Neymar, se lo pidió Messi. Y
cuando Messi pide algo... algo hay que hacer.
La parte económica
En el apartado económico, más de lo mismo. Han cerrado las cuentas en
positivo de milagro. Vender jugadores para no dar números negativos es
tan lícito como arriesgado. O sea, que también en este apartado se
vive al límite. A todo eso, ha tenido que pedir un nuevo préstamo para
poder pagar la clausula de Griezmann. Es normal que en la tesorería
del Barça no posea 120 millones de euros en efectivo pero a la postre
hay que pedirlos. En este caso, se ha llegado un acuerdo con el fondo
de inversiones británico, Sports Capital 23 que en este caso actúa
como un banco. El managing Director, Jonny Nye de Capital 23 es un
experto hombre de marketing deportivo que había trabajado en Nike.
El espai barça
Respecto al Espai Barça, los actuales gestores del club tienen muy
claro que no puede afectar a las cuentas corrientes de la entidad y
que hay generar recursos propios, patrocinios o créditos para pagarlo.
Sin embargo, tal y como anunció esta semana El Periódico, el club está
estudiando una nueva vía de financiación. De hecho, el Barça rechazó
una oferta de 570 millones de la compañía catalana Grifols a cobrar en
20 años. Hay quien dice que fue un error no haber firmado con Grifols
ya que era dinero contante y sonante y no generaba deuda. Sin embargo,
el club se ha puesto en manos del grupo de banca de inversión, Goldman
Sachs que juntamente con la empresa de Javier Botín, JB Capital
Markets, han garantizado al Barça cerca de 700 millones a través de un
nuevo fondo, en este caso, sustentado por cinco bancos interesado por
el negocio que generará el Espai Barça y el ‘tittle right’ del
estadio.
Las garantías serían los beneficios que se producirían a
partir de los ingresos que genere el nuevo Espai Barça. Eso sí, el
apellido del estadio podría ir variando según los acuerdos a los que
llege dicho fonfo. En las próximas semanas se conocerán la evolución
de estas negociaciones y si prosperan, incluso Bartomeu podría
presentar la oferta a la Asamblea de compromisarios que se celebrará
en octubre. De cualquier manera, a día de hoy ya se sabe que el Espai
Barça costará más de 700 millones, 100 más de los previsto, y todavía
no se ha ingresado ni un euro. Eso sí, la obras siguen en marcha y a
finales de agosto se inaugura el Estadi Johan Cruyff.
A todo eso, sería bueno saber el estado actual de la deuda del club.
Laporta dejó una deuda de 400 millones, en la etapa de Faus se llegó a
bajar hasta los 250. ¿Cuál es la de ahora?
La parte social
Respecto a la parte más social del club, ahora lo único que más ocupa
al presidente y alguno de sus directivos es quien será el sucesor de
Bartomeu. Como ya hemos apuntado en algunas ocasiones desde esta misma
página, el vicepresidente Jordi Cardoner es el que mejor posicionado
está, el que más experiencia tiene y el que cuenta con más apoyos
internos. Sin embargo, Jordi Vilajoana sigue empeñado en ofrecer
resistencia y no descarta presentar candidatura. De momento, se está
haciendo fuerte en el fútbol base y sus propuestas, antes frenadas por
Mestre, avanzan.
Un año decisivo
Bartomeu ha dejado de ser un presidente conservador a convertirse en
el más progresista de todos. Si le sale bien será el primer presidente
del Barça en salir por la puerta grande. De lo contrario, saldrá en
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