Se acaba el tiempo. Sólo quedan 5 semanas y 2 días para cambiar de año, falta una foto y no es una foto cualquiera. Falta la imagen de Messi firmando su renovación que, según el Barça, está más que rubricada. El acto de concesión de la Bota de Oro era una buena ocasión para oír hablar al delantero pero sólo mencionó nobles causas, la importancia del juego colectivo, lo buen vecino que es Luis Suárez, que siempre que se queda en el banquillo “se arma un poco de revuelo” pero ni pío de la dichosa imagen. No sorprendió a los presentes porque el director de Marca, Juan Ignacio Gallardo, había prevenido de que “el asunto de la renovación está en boca de todos pero hoy es un día para homenajearte y que nada reste protagonismo al galardón”. El gozo en un pozo. De hecho, el mejor momento fue cuando al presentador se le ocurrió pedir una gran sonrisa a Messi y compañía de un modo peculiar “¡Venga, como si Hacienda nos devolviera siempre, venga a reírnos!”. Sea como sea la ausencia de la maldita foto y que Messi no hablara con Bartomeu provocó cierto jolgorio en Casa Pedrerol “¡Qué esperpento, el presidente buscando una foto y Messi pasando de él, no hay foto junto a Leo, la foto no llega, qué mal color tiene esto!”. Por suerte, ese mismo día uno de los aspirantes a llevarse al argentino, Guardiola, dijo desde Manchester “que Messi renueve es lo que todos deseamos”. Amén.
Messi, 4 botas y 37 días
OPINIÓN
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