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La caverna se prepara para recibir a Guardiola

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guariola / | sport

El morbo de la champions. El sorteo de los octavos de final de la Champions ha provocado emparejamientos para todos los gustos y disgustos. Porque si el Valencia lo tiene relativamente fácil ante el Atalanta y el Nápoles no debe ser un rival complicado para el Barça, Madrid y Atlético se enfrentarán a dos contrincantes tan terribles como el Manchester City y el Liverpool.

Y si hay algo que genera máxima expectación es el regreso de Guardiola al Bernabéu. Un retorno con un morbo futbolístico y mediático que presagia emociones fuertes. Volveremos a ver, escuchar y leer en las próximas semanas (los partidos de octavos se disputan a partir del 18 de febrero) toda la artillería periodística anti-Pep.

El exentrenador blaugrana continúa siendo el técnico más odiado por la prensa madridista. No le perdonan todo lo que ganó con el Barça: 14 títulos en 4 temporadas inolvidables. No le perdonan las humillaciones que le infligió al Madrid: del 2-6 en el estadio blanco (del que se han cumplido ya 10 años) al KO en las semifinales de la Champions del ‘puto amo’. Pero, sobre todo, no le perdonan su ideología. 

El Guardiola político

Guardiola se ha significado políticamente, de forma desacomplejada, durante los últimos tiempos. Y hasta se ha convertido en imagen de Tsunami Democràtic, la plataforma independentista que quiere utilizar el clásico de mañana como escenario de sus reivindicaciones. Lo que en cualquier sociedad sería un ejercicio de madurez democrática, en ciertos sectores (bueno, en muchos sectores) de la caverna mediática española, que Pep piense como piensa es casi un crimen.

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El odio hacia Guardiola es inversamente proporcional a los elogios que han recibido todos aquellos (pocos) que en los últimos tiempos han podido ganarle en un terreno de juego. Por eso, el duelo del Manchester City contra el Madrid promete hacer saltar chispas desde el minuto uno. Y no, preciosamente, por cuestiones futbolísticas