Lo de Alba y Luis Enrique va a quedar en un juego de niños comparado con el mal rollo entre Solari e Isco. A pesar de ofrecer una imagen penosa cayendo ante el Leganés, el Real Madrid se ha clasificado para los cuartos de la Copa, cosa que no puedo afirmar del Barça.
Y no lo digo solo porque cuando envío estas líneas aún no ha jugado contra el Levante, más bien me apelo al follón Chumi puesto que parece que ‘El Mundo’ intenta evitar un posible triplete del Barça desde los despachos. Pero volvamos al ‘caso Isco’. Ante el Leganés Solari tuvo la gentileza de alinear el jugador desde el principio, pero lo retiró en el minuto 67 a pesar de haber protagonizado la mejor ocasión de gol.
La salida del jugador fue tensa a más no poder, momento en el que la prensa se ha recreado con todo lujo de detalles incluyendo una pregunta al entrenador. “Usted no saluda a Isco, no le felicita pero sí lo hace con Lucas… ¿hay algún problema por el que usted no le salude?”, disparó un periodista mientras el técnico se despachaba con un simple (y falso) “¡en absoluto!”.
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Toda esta polémica resulta muy atractiva para la canallesca pero como bien decía en ‘El Larguero’ Manu Carreño “el debate de Isco está quitando el foco a lo importante, que el Madrid de Solari está jugando peor que con Lopetegui, la polémica tapa muchos de los defectos del club”. La tinta de calamar, querido Watson.