El escolta de los Dallas Mavericks, Luka Doncic, ha recuperado su mejor versión. Si es que en algún momento dejó de ser excelente. Con una autoridad absoluta y unos números que le catapultan como el jugador más en forma de la NBA, el ex del Real Madrid ha liderado a los de Jason Kidd hasta los play-off y podría ser la primera vez desde su desembarco que lo hagan con ventaja de campo.
El esloveno, que ha vivido dos temporadas estelares en la franquicia de Texas y va camino de ser uno de los jugadores más históricos de la competición estadounidense, ha promediado 33.6 puntos en los últimos tres compromisos ante Jazz, Lakers y Cavaliers. Además de una media de 11 rebotes y 10 asistencias. Tres victorias clave para consolidarse en la zona alta de la tabla tras los todopoderosos Suns y los descarados Grizzlies de Ja Morant.
Olvidada ya la lesión persistente en el tobillo izquierdo que le tuvo apartado de las pistas durante todo el mes de diciembre, Doncic ha asumido todo protagonismo de una pizarra donde ya no está Kristaps Porzingis: sus promedios de esta temporada superan los de sus dos primeras temporadas. En esta 2021/22 ha firmado 1.8 puntos, 0.7 rebotes y 0.7 asistencias más por encuentro y también ha elevado la precisión de su porcentaje en tiros de tres: ha crecido de un 33.6% a un 35.1%.
Un ritmo anotador insaciable
Más allá de la incidencia y determinación directa e indirecta en las victorias de su equipo (48-29 del equipo y 40-20 con él en pista), el escolta ha firmado 41 dobles-dobles en 60 apariciones este curso y un total de 10 triples-dobles. No deja de ser significativo que hasta en cinco ocasiones se mantuvo entre los 40 y los 49 puntos y en una los superó: ante los Clippers, en una victoria que marcó un antes y un después en la temporada y que catapultó definitivamente a los Mavs como uno de los mejores equipos de la Conferencia Oeste.
El balcánico no sabe lo que es firmar una anotación de una única cifra, ya que siempre logró 10 puntos o más: 10-19 (7), 20-29 (29), 30-39 (18), 40-49 (5) y +50 (1). El tres veces All-Star y Rookie del año (2019) se mantiene como el cuarto anotador con mejor promedio de la temporada con un total de 28.1 puntos, justo por detrás de LeBron James (30.1), Antetokounmpo (29.9) y Joel Embiid (29.9).
¿Momento para ilusionarse?
Doncic reconoció tras la victoria ante los Cleveland Cavaliers que su equipo ha mejorado especialmente en el aspecto defensivo y el propicio contexto en la tabla de la Conferencia Oeste, donde se sitúa por delante de equipos superlativos como Golden State Warriors, Denver Nuggets, Utah Jazz o Los Ángeles Clippers, invitan a ser optimistas con los play-off que se disputarán a partir del 16 de abril.
El esloveno fue claro en su discurso: "Este año somos obviamente mejores a nivel defensivo y tengo mucha confianza de cara a los playoff, más allá del rival que nos toque. Esperemos que nos toque ventaja de campo, pero con toda la confianza vamos a jugar cada partido e intentaremos ganar". "Muchas veces en muchas jugadas nos quieren doblar y nosotros lo estamos haciendo mejor y mejor en cada partido (con los pases). Es lo que tenemos que seguir haciendo cada día", sentenció.
Repetir el éxito de 2006 y 2011
La conferencia del condado de Texas ha edificado un equipo competitivo en torno a la figura de Doncic como ya sucediera en el pasado con Notwizki con una único objetivo: volver a estar en la lucha por el anillo como ya sucediera en las ediciones de 2006 (subcampeón) y 2011 (campeón). Desde entonces, los Mavs no han pasado nunca de primera ronda (2012, 2014, 2015, 2016, 2020 y 2021).
NOTICIAS RELACIONADAS
Atrás queda ya un futuro complejo: pese a no clasificarse en 2013, 2017, 2018 y 2019, los Mavs han sido un habitual con la llegada del siglo XXI y su crecimiento como franquicia ha sido exponencial. Entre 1990 y 2000, los texanos no se asomaron a los ocho primeros puestos de la tabla y vivieron, sin duda, su periodo más oscuro desde su fundación en los años 80.