Se acabaron los trámites para la selección femenina. Las chicas de Miki Oca se enfrentaron al último ‘sparring’ del Grupo B en el Europeo de Barcelona y enfocan sus pensamientos ya hacia un partido ante Rusia de mañana (22:00) que será clave para definir el liderato final. Con la derrota de las rusas frente a Hungría, ambas empatan a nueve puntos y dejan el camino a las de Miki Oca bastante allanado. Deberán, eso sí, empatar al menos para asegurarse esa primera plaza que les haría medirse en cuartos de final, previsiblemente, a la débil Francia.
Contra Serbia, nueva goleada de escándalo que se sumó a las logradas previamente contra Alemania (2-27) y Turquía (32-2). Volvió a quedar patente la enorme polarización en un waterpolo femenino cuyos polos están muy muy distanciados. Aún así, a pesar de su aplastante superioridad, las españolas mantuvieron la tensión y la concentración, siempre pensando en ese ‘goal average’ que puede acabar siendo clave al final. El primer periodo finalizaba con un 1-7 que dejaba ya el duelo visto para sentencia.
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con todo ante rusia Podríamos decir que la preparación para ese partido contra Rusia se está llevando a cabo desde que terminara el duelo inaugural contra Hungría, otro de los huesos de este Grupo B. Frente a las balcánicas todo siguió el guión del primer periodo y los goles fueron cayendo uno tras otro, si bien Serbia se defendió algo mejor que las turcas el martes. Judith Forca, Anna Gual, Pili Peña, Leitón, la artillería española descosía a la defensa de un equipo serbio que apenas podía achicar agua. Bien distinto será el guión ante Rusia, que históricamente ha puesto en problemas a las de Miki Oca con su juego anárquico y físico. Eso será mañana. Hoy, turno de los chicos contra un hueso como Montenegro.